Observaciones de un Hijo del Exilio.
Alex A Marrero
Parte 2: Nostalgia
La añoranza más grande que llevo por dentro en relación a Cuba y mis raíces se refleja directamente en el aspecto artístico/cultural y más específicamente aún: la música. Como el planeta entero ya lo sabe, la cultura musical de Cuba es una sumamente rica, amplia, especial y altamente poderosa. Sencillamente dicho, el sonido de la clave es el latido del corazón de todos los cubanos y gracias a ésta, también es el latido de todos los Latinos.
La mezcla de las culturas que ocurrió en esa isla: española, africana, francesa, crearon una música tanto elegante como callejera, incomparable y con variantes casi infinitas. Estilos, géneros y formas increíblemente originales y variadas las cuales, a principios de la década del 70, al mezclarse muchas de ellas con un poco de influencia de ritmos de Puerto Rico, y con un toque de perspectiva nuyorquina se creó un fenómeno musical “La Salsa”. La música cubana es diariamente imitada por muchos y homenajeada por todos, ya sean músicos, artistas, intelectuales, bailarines, escritores, profesionales y gente normal, rica o pobre que solamente adora los sonidos y como le conmueven cuerpo y alma.
La manera en la cual Cuba fomentó desde un principio la música y la educación superior musical es lo que ha llevado a que su música llegara a alcanzar tal respeto y cariño universal. Añoro el poder algún día ir a esa increíble Isla y aprender directamente de mis paisanos más sobre ese lenguaje musical. Convivir con ellos al sentir el latido del Caribe, en la misma isla donde nació ese idioma sin palabras que levanta el espíritu y conmueve a todo el ser.
Desde que tengo memoria, entre nosotros los hermanos se ha hablado muchas veces sobre hacer algún escrito, canción, documentación oral, película, algún tipo de homenaje o pequeño detalle a la historia de nuestros padres. Siempre nos quedamos en la idea, nunca llegamos a sembrar la semilla. Solamente se quedaban las ideas en un estado de “deberíamos hacer tal cosa o tal otra”. Por mi cuenta hice varios intentos durante algunos años aquí y allá de escribir canciones acerca de lo que vivieron y nunca pude -en verdad- escribir algo que me dejara satisfecho. Siempre me faltaba algo. También, a mi manera de verlo, yo no tenia la educación especifica sobre la música cubana que me hubiera gustado tener para hacer algo en el lenguaje que ellos conocen. Después de años de trabajo y estudio personal me sentía más cómodo con las formas musicales de la isla.
La falta de algún homenaje (porque espero que no sea el último) que quisimos hacer cambió para mi después de tantos años, un día, y en sólo cuestión de minutos. El veintisiete de agosto del dos mil cinco, abrí mi correo electrónico y vi un mensaje de mi madre, como muchos que manda regularmente a sus hijos y amistades. El título era simplemente: Compartiendo Nostalgia. En unos breves enunciados nos explicaba que el escrito era algo así como un poema sin mucha estructura (según ella) acerca de sus recuerdos de tener que salir de Cuba, pero que aún así se sentía orgullosa de él, y esperaba que nos gustara. Al leer esas palabras, sin pensarlo dos veces tome la guitarra acústica y le puse música y melodía a esas palabras. Eran palabras que yo nunca hubiera podido escribir, pero que con amor y orgullo ahora les podía traer otra vida completamente.
Como dice el Brasileño Caetano Veloso en una de sus lindas canciones: “Como é bom poder tocar um instrumento”. Hice unos cambios muy, muy pequeños a la letra y en quince minutos la canción estaba terminada. Mi grupo musical en aquel momento estaba a punto de grabar un disco y lo que yo más quería entonces era hacerle un arreglo digno a esta canción para poder incluirla en el disco. Así funcionó el plan con la ayuda de mi amigo, colaborador y gran arreglista Scotty McIntosh. Nostalgia es parte de ese disco tan variado musicalmente que es “Evolución” y es mi tributo en aquel a mis padres, Cuba y el exilio. No es ninguna obra maestra ni va a cambiar el mundo, pero es algo sincero y del corazón. Y la canción al igual que yo, mantiene algo de tradición pero tiene influencias externas.
Para agregarle un poco mas de profundidad al tema, (¡por que está tan ligera la cosa!) el día que enterraron a mí abuela materna (quien acababa de fallecer) me llamaron desde Miami mis hermanos que estaban ahí atendiendo su funeral. Llamaban para avisarme que todo estaba en marcha, que estaban ahí, tristes, pero juntos y que me extrañaban. Colgué el teléfono y entré directamente a la cabina de grabación (mi closet) para añadirle las vocales a Nostalgia, lo único que faltaba por completar de la grabación de dicha canción. Muchos sentimientos se soltaron de mí en la grabación de esas vocales. De nuevo, la catarsis de poder expresarse musicalmente, resaltó y me ayudó de manera increíble. A la vez, lo que sucedió fue que la canción tomó otro nivel de significado para mí ya que en ese momento yo se la cantaba a mi abuela, que en paz descanse.
Hago este escrito ahora de la misma manera que los solía hacer de pequeño, para compartir mi punto de vista sobre algunas cosas y para que lo leyera mi familia. Lo hago para contar una parte de nuestra historia como familia. Lo hago para que al igual que con Nostalgia, les pueda hacer tributo a mis padres y a todos aquellos exiliados de su patria por gobiernos opresivos.
Hago este escrito en honor a mis padres ya que no siempre soy el hijo mas presente, ni tampoco el hijo ideal. Lo hago en tributo y con cariño a mis hermanos y a mi hermana quienes por bien o por mal crecimos en un hogar de exiliados Cubanos en México (¡aunque se que Vic y Dan no lo van a leer porque esta muy largo!). Lo hago en honor a todas las familias e hijos de exiliados. Lo hago por el amor a una patria que no conozco. Lo hago por amor a la familia inmediata que conozco y la que no conozco también. Lo hago, al igual que la canción y toda mi música: en honor a mis ancestros.
Esto comenzó simplemente por que mi madre me pidió que le contribuyera algo a su nuevo “Blog” y aparentemente cuando empiezo a escribir, como dicen en México: me clavo. Lo único más que puedo ofrecer ahora es el sentimiento que traté de compartir en la canción que escribimos juntos -sin saberlo- mi madre y yo. Quise brindarle tributo a sus palabras y a las experiencias de mis padres, la de sus padres, y así sucesivamente.
Si gustan, la pueden escuchar si van al siguiente sitio:
http://www.sonicbids.com/ghandaia (En la parte superior de la página hay un botón que dice: Audio. Hagan clic en dicho botón y en la página nueva encontraran la canción Nostalgia. Es la tercera en la lista de tres.
O pueden tratar de entrar directamente a las tres canciones entre ellas a Nostalgia, traten aquí:
http://www.sonicbids.com/epk/epk_body.asp?epk_id=28435&poll_id=&name=music&skin_id=7
Espero que sea un tributo digno y que la disfruten.
Alex A. Marrero
Miércoles, 15 de julio de 2009
Austin, Texas.
Gracias Alex por tus palabras. Tu narración sobre la intención de hacernos un homenaje a tu padre y a mí me ha emocionado. El detalle de que inclusive te acuerdes hasta de la fecha en que recibiste mi modesto poema, me halaga grandemente. Me siento muy orgullosa de ese disco. Fue indescriptible lo que sentí el día que lo oí por primera vez. Gracias mi querido músico, te quiero mucho, Mam